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Mi primera vez − 2da. Parte

¿Qué habría querido decir mi hermano con entregar la concha y el orto?

Me pregunté ese día y se lo pregunté…

Yo: ¿qué querés decir con eso tarado?

Leo: que tenés que entregar el rosquete, bobita. Tenés que coger.

Yo: ¿y cómo es eso?

Leo: ¿te enseño?

Yo: si enseñame todo para recibirme de putita.

Leo: buenísimo, sacate el short y ponete en 4 patas. Mejor arrodillate mirando el respaldo del sillón y apoya los brazos.

Me saco el short y me pongo como me pide.

Leo: quedate quietita, esto te va a gustar.

Me corre la bombachita rosa que tenía y empieza a tocarme la conchita con un dedo, obviamente que estaba cerrado, pero húmeda. De repente baja mi calzón hasta los muslos y sigue, pero esta vez empieza a meterlo despacito, yo me entumecía y cerraba.

Leo: tranquila, si te duele paro, pero tenés que estar relajada. No te voy a lastimar.

Pasó su lengua por mi conchita y se sintió muy excitante.

Leo: que dulce conchita tenés hermanita, te la voy a comer toda. ¿Te gusta?

Yo: si me encanta. ¡Seguí!!!

El dedo se iba metiendo cada vez un poquito más y su lengua me mojaba toda.

Se sentó y me agarró de la cintura.

Leo: vení trolita, sentate en mi pija, vamos a jugar un rato. Agarra saliva de tu boca y mojámela.

Le mojé su pedazo con mi saliva y me la apoyó en mi pequeña y cerrada concha.

Despacito iba empujándome de las caderas mientras yo me apoyaba en él porque ya empezaba a sentir dolor.

Yo: ¿cómo vas a meter semejante cosa ahí sí está cerradoooo???

Leo: va a ir entrando, te va a doler un poco, pero cuando entre lo vas a disfrutar.

Yo: bueno, dale.

Con movimiento y aguante fue entrando hasta la mitad, me levantó despacio y me bajó de nuevo. Sentía que me estaba abriendo en dos, lo que en realidad pasaba era que me estaba partiendo en ocho, como me dicen en la escuela jajaja.

Me dolía, pero quería seguir, quería convertirme en putita. De pronto siento que me baja algo caliente desde el vientre y grito.

Yo: aaaahhhhhhhhhh

Leo: uuh ¿te lastime??

Yo: nooo me bajó algo por dentro ¡y me asusteee!!!

Leo: ¡aaah tontaaa acabasteeee!!! Fíjate que debe caer líquido por mi pija.

Esa lubricación hizo que su pija empiece a resbalar más y me empezó a coger más fuerte.

Vi que por su pija caía un líquido transparente con sangre.

Yo: Leo sale sangre, aayy ¡pero seguí no pares!

Leo: ¡te estoy rompiendo todaa! Aah como me pusiste la pija de dura putita. Ponete en 4.

Yo: ¿cómo?

Leo: como un perro. tonta.

Me puse en 4 y me la metió de nuevo, la sangre empezó a caer por mis piernas, pero cada vez quería que me coja más y más. Entonces empezó a hacerlo más rápido y más y más y más.

Leo: Voy a acabar, ¿querés tomar más lechita?

Yo: ¡sii damee!

Sale y me la pone enfrente.

Leo: ¡abrí la boca yaaaaa!!!!

La abrí y me dio lechita de nuevo. Yo diría casi la misma cantidad de antes no lo sé, pero me metió la pija en la boca, con sangre y todo y mientras le redondeaba la pija con mi lengua me fui tragando la leche calentita y muy rica…

Leo: ¡la puta que naciste para serlo eh!

Yo: ¿qué decís tarado?

Leo: que sos bien puta, eso digo. Si te gustó lo de hoy vas a aprender bastante y te vas a convertir en la más putas de todas.

Yo: ¡qué lindoooo! ¡Me duele la concha! ¡Me voy a bañar! Gracias hermanito. Me gustó coger con vos, ¿lo hacemos de nuevo otro día?

Leo: por supuesto mientras más lo hagas más se abre y vas a poder coger con pijas grandes o no. Bueno, dale bañate que puede venir papá, yo limpio.

Le di un beso en la boca y me fui a bañar.

Y así fue mi primera vez, con mi hermano enseñándome como chupar y como coger. Espero convertirme en la puta que él dice algún día, pondré mi mejor esfuerzo…

¡Hasta la próxima!!!

Besitoooosss…

Stephy

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