Ya soy el puto del equipo (XV)
La orgía en la casa de la playa. Jamás he visto gente tan puntual. Abelardo les había dicho que no vinieran a las 9 sino a las 8 de la mañana porque habría desayuno para… Leer más »Ya soy el puto del equipo (XV)
La orgía en la casa de la playa. Jamás he visto gente tan puntual. Abelardo les había dicho que no vinieran a las 9 sino a las 8 de la mañana porque habría desayuno para… Leer más »Ya soy el puto del equipo (XV)
Historia de dos amigos: Jesús Alejando y Álvaro Me levanté muy tarde y porque mamá vino a despertarme, había dormido poco, no me sentía con ganas de ver a nadie, solo deseaba cerrar los ojos… Leer más »Dulce y amarga amistad (13 y último)
Salazar, enaltecido por lo que decía el Marqués, volvió a chupársela mientras le pegaba fuertes meneos. Y el Marqués volvió a la carga, para empezar a turnarse con él; transformando, el tan deseado placer, en… Leer más »Yago (III): El cabo Gabriel
Era automático. En el momento en que Ken vio la polla de Daisuke sus ojos lentamente se quedaron en blanco y su mandíbula se relajó suavemente en feliz excitación. Era como un trance que lo… Leer más »Falo correcto
– ¡Maldita sea! ¡Me cogió la tarde en la consulta y no podré coger el bus del medio día! Ese pensamiento era el que tenía dominada la mente de Antonio, un chico que caminaba tan… Leer más »Intenciones ¿cambiantes o eternas? (Capítulo 1)
-Está jadeando el chico, ¿te diste cuenta, Gervasio? –dijo el tal Rolando. -Sí, ¿estará caliente? -Con esa cara y ese cuerpo, para mí que es putito… -Contanos, rico, ¿sos putito? -S… sí, señor, soy… soy… Leer más »El bosque (Final)
Entre sueños, Nandillo pudo escuchar a Benoît diciéndole a Pierre que ya podía enganchar los caballos en el carruaje del Duque; Alfonse le había explicado como esconder bien a Yago, y el equipaje ya estaba… Leer más »Yago (VIII): Final
Esta historia empezó hace un mes en medio de una tarde de calentura, ese día me había despertado de un sueño húmedo, sintiendo que necesitaba un hombre inmediatamente dentro mío, sin embargo, para ese momento… Leer más »¡Por caliente mi juguete me envió al proctólogo!
A mí me… me gusta ser varón, señor, pero… pero a la vez me excita que me confundan con una mujer… -¿Y te gusta estar vestido con ese uniforme de sirvienta? –me preguntó el señor… Leer más »Continuación de El bosque (final)
Don Abelardo hizo que llamara al señor Ernesto delante de él y eso hice… Marqué el número y casi de inmediato oí la voz del dueño de la casa: -Hola… -Ho… Hola, ¿don Ernesto? -Sí,… Leer más »El vecino del fondo (5)