Por ser el único hermano soltero y contar con tres recamaras en mi apartamento, recibí como huésped a mi padre por algunos años. Me daba gusto cuidarlo, pero, no podía dar rienda suelta al gay… Leer más »Un maestro con su alumno en mi casa
¡Pasión! Soy muy apasionado en todo lo que hago, y el sexo no es la excepción, el buen sexo sexo requiere más que bocas, culos y pollas: ¡SE NECESITA PASIÓN! Deseo, sentimientos a flor de… Leer más »Más sobre mí
Llevaba unos días trabajando de manera eventual en el puerto de La Coruña; se trataba de descarga de pescado congelado; allí trabajaba toda clase de personas, había gitanos, emigrantes, parados que no encontraban trabajo, etc.… Leer más »Follado por el gitano y sus colegas
Los padres de Enrique, mis tíos, me encargaron que le comprara unos vaqueros nuevos. O sea que el sábado salimos de compras. Un amigo mío, Bruno, tiene -bueno, su familia- una tienda de ropa bastante… Leer más »Mi primo Enrique (parte II)
Un hombre maduro consiguió atraer de una manera muy fuerte al joven Martín Al día siguiente, hizo la rutina de irse al parque a trotar pero esta vez la hizo en la mañana para que… Leer más »La curiosidad de Martín que terminó en deseo (II)
Hola quiero disculparme por este tiempo que no eh escrito pero tuve algunos problemas que no vienen al caso así que comenzaré con lo que a todos nos importa y que nos tiene aquí. Hoy… Leer más »Inicio a la prostitución (Sin marcha atrás)
Continuación de: Davy evoluciona Durante la vuelta a casa en el taxi me sentía feliz y risueño, había descubierto en Davy una personalidad desconocida hasta ahora y me gustaba como era, estuvimos un ratito más… Leer más »h) En la familia
Continuación de: Doble penetración Habíamos vuelto a los locales de la empresa y antes de salir Santi me entregó una crema que me tenía que dar en el culo para ayudarle a que se cerrara… Leer más »j) Proposición de Davy
3 de la madrugada, todo tranquilo en la casa de Takeru pero su mente se revuelve, está agitada, está teniendo un maravilloso sueño de los que nunca habia tenido en demasiado tiempo, su obsesión por… Leer más »Dueño total de sus vidas en un sueño
Al día siguiente, al volver de la escuela, hice lo que me tenían ordenado esos viejos deliciosamente perversos: me desnudé, dejé la mochila y llamé a la puerta del cuarto de la “señorita”… -Entrá, Jorgito…… Leer más »En manos de dos perversos (4)