Eres mi Dalila o eres mi Lillith?
Eres el Ángel oscuro Que ronda las almas heridas
El ente que habita
En la oscuridad herida por la luz
Tus adornos no son
La persona secreta del corazón
en la investidura incorruptible del espíritu
Sino la voluptuosidad de la carne
El deseo, el desenfreno y la pasión
Déjame probar
La miel de tu jardín
Ese cuyo dulzor
Vuelve un rey cantarín
Al mendigo del pueblo
Déjame vertir
En tu bajo vientre
La cálida tinta de mi estirpe
Sirena, eres mi Dalila o mi Lillith?
Si lo eres
Líbame Dalila
Líbame Lillith
Cual cordero inocente
De tu sacrificio
En el ara que es tu lecho
Y déjame morir en tu regazo
Inmólame Dalila
Inmólame Lillith
Y llévame a esa pequeña muerte
Que es el orgasmo
Ese el que produce
Tu dulce lengua hedónica
Felame y libame!¡
Tatúame sirena
Con la marca invisible del deseo
Arranca mi piel
Y expón mis huesos al viento
Que tu infierno es placer
Una caricia
Y un tormento
Un cautiverio
Y una libertad
No tengo albedrio
Felame sirena
Con tu dulce lengua marchita
Libame sirena
En el suave licor de tu perdición
El caliz de tu pecado
que mi piel
Solo arde
Con el roce de tus dedos
Dame una razón
Para morir
Lejos de tus caricias
Sin sentir
El olor de tu pecado
Que tu sudor es caramelo
Y tu piel es alba curtida en la malicia
nada soporta el paso del tiempo
Ni los embates de la distancia
Sin que unas ruinas se vayan a volver
Por eso mi piel es roca
esa que han lamido los siglos
Cuando te he dejado de ver
Felame Dalila
Felame lillith
En la caverna del averno que oculta tus joyas
Y dejame conservar
Un pétalo de tu flor
Fiel testigo de mi perdición…