Saltar al contenido

Nada es lo mismo. Él cambió (parte 3)

Volví a terminar mi historia y espero les guste, en verdad fue el beso más apasionado que él me ha dado, me hizo olvidar todo lo pasado, en medio de una confusión de sentimientos, sentí sus manos tocarme suavemente, besar mi cuello de la manera más sutil, ahora no era el frío lo que me hacía temblar era él quien lo hacía…

No sé cómo ni porque comenzó a decirme frases como: te quiero, no tienes que tener miedo yo te cuido, eres mi amor y lo sabes así no te lo exprese, tú sabes que te amo y quiero que seas mío hoy y siempre.

Mis emociones fueron tantas que no se en que momento la ropa fue a parar al piso y nos fundimos en un beso, al que le siguió un volcán de caricias, gemidos y el más bonito encuentro sexual, no se donde aprendió hacer el amor de esa manera tan placentera, me sentí en las nubes con cada lamida que daba a mi clítoris y partes íntimas, como presionaba mi punto g haciéndome gemir una y otra vez, sentir esa humedad y saber era por él, me hacía excitar al máximo fueron dos horas de placer delicioso en los que nada perturbó nuestras mentes.

Lo más delicioso saberme deseada por ese hombre a quien tanto amo. Nuestro amanecer fue el comienzo de una nueva etapa de nuestras vidas, donde Robin promete no hacerme sufrir y cuidarme. Pacto que sellamos con un beso y haciendo el amor…

Espero les haya gustado mi historia. Gracias.

Deja un comentario