Saltar al contenido

El privado de Buenos Aires

Verano de viaje por Capital Federal, haciendo trámites, yendo de un lado al otro, casi terminando cruzo a una rubia infernal, lo cual no pregunten porque me despertó unas ganas tremendas de sexo.

Termino el último trámite me compro una gaseosa para calmar un poco el calor de la City y me pongo a ver anuncios de sexo. Encuentro varios interesantes y comienzo a mandar mensajes a diferentes números, todos tenían en común que en sus anuncios decían muy dotada, era lo que buscaba lógicamente.

Una sola me responde muy amablemente contándome sobre sus servicios y tarifas, le respondo contándole lo que buscaba y continuo la charla un poco más relajada no tan mecánica como suele ser con toda trabajadora sexual, era como si fuésemos amigos o conocidos, eso me agrado. Me pasa la dirección aproximada y que cuando llegue la llamé y me decía la dirección exacta. Antes de partir busque el anuncio que correspondía a ese número ya que había enviado varios mensajes y no sabía cuál era el de ella. Encuentro el anuncio y ahí fue donde dudé un poco de ir porque era el único anuncio que no tenía foto, lo que decía estaba bien decía que era un privado muy discreto dónde todas eran dotadas y cumplían todas las fantasías.

Por el hecho de no tener fotos dudé un poco pero algo dentro mío o quizás la buena onda de aquella voz en el teléfono me convenció de ir a ese encuentro.

Llego a la dirección que me dijo y me pasó el edificio y el piso donde era, tocó el portero me anuncio y me abren desde arriba, la voz del portero no era la misma del teléfono pero no le di importancia en el momento, era una zona bastante transitada cerca de facultad de medicina.

Llego al departamento tocó timbre y automáticamente se abre la puerta, una rubia de rulos musculosa blanca sin corpiño tetas grandes y pezones enormes, debajo minifalda con bolados tipo colegiala muy cortita, me hace pasar nos damos un beso en la mejilla nos presentamos. El ambiente era muy agradable luz tenue muy limpio y buen perfume, me invita a sentarme en un sillón y me invita algo de tomar a lo que le aceptó porque hacía mucho calor además de los nervios de meterme en un lugar desconocido.

Trae unas latas de cerveza y vasos y se sienta a mí lado comenzamos a charlar me pregunta de dónde era le dije la verdad que venía del sur de Chubut y ahí comenzamos una charla más amena dónde por un rato me olvidé que iba a contratar un servicio sexual. Me aclara que no era de charlar de esa manera pero como estaban por dejar de trabajar ese día porque tenían planes para la noche y yo sería el último cliente.

Ya un poco más en confianza le pregunto si era ella con la que hable al principio y me dice no que había hablado con su amiga que era la dueña del departamento y que se estaba bañando y las otras estaban haciendo otras cosas, al escuchar “otras” me dio algo de curiosidad y miedo a la vez, cuántas serían? Que podría pasar si yo era el único cliente en el lugar? Había escuchado historias que en algunos privados de esta clase hubieron clientes que les robaban y hasta golpeaban.

Trate de calmarme y disimular mis miedos y comenzó a preguntar por lo que buscaba gustos y preferencias sexuales. Inconscientemente me relajo como si estuviera hablando con una amiga y le digo que iba como pasivo que buscaba una bien dotada y me dice “acá no vas a tener problema todas somos muy dotadas” yo me sonreí como desconfiando que sea cierto. Otras varias veces me habían dicho ser muy dotadas y al momento del encuentro no superaban los 19 cm.

Me dice que la espere un ratito que iba al baño, al quedarme solo sentí ganas de irme no sé porque, pero a la vez estaba excitado, era algo ambiguo que no entendía porque por un lado me quería ir pero por el otro quedarme y ver qué pasaba.

Vuelve a los minutos pero al escuchar los pasos me doy cuenta que no venía sola, precisamente eran dos, me presenta diciendo que era la dueña con quién había hablado antes por teléfono, una morocha de pelo lacio hermosa alta de tetas medianas muy naturales, tenía puesta solo una bata abierta hasta su ombligo que dejaba ver la mitad de esos pechos perfectos.

Nos saludamos con un beso como si fuéramos amigos y se sientan en el sillón una a cada lado, la que me había recibido le cuenta que no era de capital que era del sur y que buscaba alguna bien dotada, la dueña se sonríe y se muerde el labio como ansiosa por probar hasta donde podía llegar.

La que me había recibido se levanta y desaparece quedándome solo con la dueña charlando sobre mí ciudad que le gustaría alguna vez conocer etc. etc.

Entre charlas no podía evitar por momento bajar mí mirada a esas tetas que querían salirse de esa bata y ella lógicamente se dio cuenta, termino mí cerveza de un sorbo largo y me ofrece otra a lo que respondo que no que se me iba a subir rápido el alcohol y ella me dice “mejor papi así te relajas más y disfrutamos no tenemos límite de tiempo hoy y todas estamos casi con abstinencia” esas palabras “todas” “abstinencia” me retumbaron en mí cabeza y me dio miedo pero igualmente hizo que mí pija se pusiera como roca.

Se levanta a buscar otra cerveza y al volver se agacha para dejarla sobre la mesita y al pararse no sabía dónde mirar, se le había abierto la bata y le asomaba una de esas tetas hermosas de apariencia natural tenía movimiento de una teta natural no operada pero a la vez abajo se le notaba algo casi erecto y con mí mirada trataba de ver si algo más se le asomaba sin suerte. Lógicamente se dio cuenta se acercó al sillón y me ofreció sus tetas esta vez dejando salir a la otra dejándome a mí antojo el par de pechos perfectos casi naturales. Los tomo con mis manos sintiendo la suavidad y comienzo a chuparle los pezones y dándole pequeños mordiscos mientras ella gemía y me acariciaba la nuca. Sentía en mí pantalón una presión de mí pija y todo mojado por mis líquidos preseminales, ella con la mano que tenía libre me empieza a tocar la pija sobre mí pantalón hasta que desabrochó mí bragueta y con cierta dificultad logro sacarla, al tocarla sintió todo lo mojado que estaba y se pasó la mano por su boca lamiendo mis jugos y dijo que rico y en ese momento comenzó a chuparme suavemente lo que me provocaba por momentos ganas de acabar en ese instante pero ella como sabiendo lo que sentía se detenía y me chupaba los huevos.

Estaba disfrutando de esa perfecta chupada cuando llega la otra y exclama “gracias por esperarme” giro la mirada y estaba ahí parada totalmente desnuda y con una pija dormida que mediría 18 cm y delgada, ahí pensé que lo de dotadas no era tan cierto. Gire mí cabeza hacia el lado que se acercaba y me pase la lengua por los labios como invitando a qué colocará su pija en mí boca a lo que entendió a la perfección.

Se colocó a mí costado subiendo una pierna al sillón y me coloco esa pija dormida en mí boca, estaba sentado con una de rodillas entre mis piernas dándome una chupada tremenda mientras yo con la otra dentro de mí boca, quiso sacar y meter su pija en mí boca para que se le parara pero la detuve dejando toda su pija dentro y con movimientos de mí lengua circulares comencé a jugar con su glande como resultado fue creciendo pero sin sacarla de mí boca, poco a poco fue creciendo en largo y ancho llegando hasta el fondo de mí garganta y no me quedo otra que sacarla de mí boca y ya no era esa flácida pija mediana, había crecido el doble y cubierta de venas eso si era dorada pensaba, y continúe chupando con más ganas.

Mientras chupaba esa belleza no me doy cuenta que la otra había dejado de chuparme y cuando abro los ojos la veo acercando su pija a mí cara y quedó con los ojos abiertos viendo que lo que tenía ella era mucho más que dotada, era lo que se podría decir de otro mundo, era gigante y justo en ese momento la que estaba chipando empieza a acabar sin darme tiempo a reaccionar y me trago toda su leche. Al sacarla sin darme tiempo a nada la otra intenta meterme ese monstruo en la boca pero era realmente gigante solo me entraba la cabeza apenas y unos centímetros no podía abrir tanto la boca si rasparla con mis dientes entonces le pasaba la lengua y ella me golpeaba la cara con ese tremendo pedazo.

Se detuvieron y me hicieron colocar de rodillas en el sillón mirando hacia el respaldo quedando en 4, en esa posición la que me había llenado la boca de leche se coloca detrás dándome un profundo beso negro y la otra delante para seguir chupándosela. Así por unos minutos hasta que siento como la que estaba detrás mío me daba golpes en mí ano con su pija y me la pasaba sintiendo como resbalaba con toda la saliva que me había dejado y me escupía de a ratos hasta que de un momento a otra siento que apoya su cabeza y de un solo envión me la mete por completo lo que me provocó que casi gritara cosa que no pude por tener otra en la boca pero provoco que se me abriera la garganta y ese gran pedazo entrará unos centímetros más en mí dolorida garganta.

La que me había penetrado no se quedó ni un segundo dentro mío y la saco lo cual no le dio tiempo a mí ano que se acostumbrara la otra saco su pija y me la pasaba por toda la cara y la que estaba detrás vuelve a metérmela de un golpe haciéndome doler como la primera vez, y repetía esas embestidas una y otra vez sin darme tiempo a acostumbrarme, la sacaba y la metía de golpe una y otra vez lo que me provocaba dolor y gemidos mezclados de placer, en ese momento aparecen por el pasillo 2 más vestidas solo con unas tangas como recién despiertas preguntando que son esos ruidos y al ver la situación en ese sillón sexual digamos exclamaron con placer y lujuria en sus ojos “fiesta” se acercaron como poseídas y corriendo sus tangas salieron 2 pijas arrugadas por la prisión de sus prendas pero al ir acercándose a mí cara iban creciendo hasta entrar en mí boca y comenzar a tomar dureza, eran toda muy grande la más pequeña mediría 20 cm y todas muy gruesas entre las 3 se alternaban para metérmelas en la boca mientras la que me penetraba seguí con sus embestidas pero ya entraba sin resistencia, me había dilatado por completo entonces la saca y me la acerca a mí boca para acabar por segunda vez y le dice a la dueña, la que la tenía más grande que era gigante, “ya lo tenés listo para vos” yo me quito la pija de la boca y le pido que no porque me ardía un poco y era muy grande lo que tenía pero no hizo caso y yo tampoco puse mucha resistencia y haciendo presión en mí dilatado ano todavía no lograba entrar ni su cabeza, empujaba con fuerza y solo logro meter media cabeza y yo sentía mucho dolor, respire profundo aguante la respiración y decidí empujar hacia atrás con fuerza y ahí si logro entrar los 26 cm de ese matafuego de carne que me destrozó por dentro y se quedó quieta gimiendo de placer pero esta vez fui yo quien no dejaba que se acostumbraran mis paredes anales y moviéndome hacia adelante me la sacaba y volvía a empujar hacia atrás ella dándose cuenta se la sujetaba con una mano y me dejaba dominar la situación, al sacarla sentí mí ano totalmente abierto como le entraba aire y al empujar hacia atrás sentía pequeños desgarros en mí anillo anal hasta que deje los juegos para que me penetrara a su gusto y seguir chupando las otras 3 pijas hermosas.

Me daba embestidas por momentos muy aceleradas como perro en celo hasta que en un momento empezó a gritar y sentí como descargaba litros de esperma hirviendo dentro de mí que me hacía sentir como ganas de ir al baño y la que tenía dentro me acabo a la vez.

Se fueron turnando entre mí culo y mi boca las 4, tenía el estómago y mí culo repletos de leche, en un momento que ya habían acabado varías veces me llevan a una habitación para estar más cómodos donde tenían uno de esos sillones tipo Kama Sutra donde me colocan en posición similar, en 4 pero esta vez con la comodidad de tener todo el cuerpo relajado sin tener que mantener la posición con mis fuerzas que ya no me quedaban muchas.

Siguieron alternando sus pijas en mí boca mientras que una busca un juguete y me lo coloca bien profundo en mí culo y lo deja dentro pero era de esos inflables y comienza a inflarlo dilatándome al extremo sintiendo por primera vez que mí culo se abría al extremo, era muy doloroso pero estaba entregado a sus juegos y perversiones. Después de inflarlo al máximo comenzó a tirar de el para quitarlo pero sin quitarle el aire, hacía fuerza sin lograr quitarlo lo giraba y volvía a intentar sin suerte, me hacía recordar a mí primera vez abotonado.

Luego de varios minutos y dos que habían vuelto a acabarme en la boca logra quitarlo de mí culo y sentía como iba muy lentamente cerrandose me culo pero automáticamente siento un puño que me invade mí recto sin piedad, lo metía y sacaba violentamente casi sin resistencia, mí ano era un parque de diversión para ella.

Me penetraban una y otra vez con sus pijas con puños con juguetes, 2 de ellas se habían colocado cinturongas para hacerme una doble.

Literalmente me violaron como quisieron pero yo no ponía resistencia, estaba hipnotizado por la situación.

Totalmente dolorido y luego de varias horas, que después me daría cuenta que fueron 4 horas, terminamos en la cama totalmente rendidos cansados con el ambiente lleno de olor a sexo, como pude me levanté y fui a ducharme al pasarme el jabón por mí culo para limpiar la leche que no dejaba de caer el jabón literalmente se me pierde dentro, estaba totalmente dilatado y hacia fuerza para cerrarlo sin suerte. Estaba tratando de quitarme el jabón de adentro y entra una de ella al verme en la posición que estaba me dice “quedaste con ganas de más” y le cuento lo que me pasó y se ofrece a ayudarme metiendo los dedos para tratar de agarrarlo sin suerte porque se le resbalaba al ser jabón y me dice respira profundo y me manda la mano entera y ahí logra agarrarlo en mí interior pero todavía tenía que sacar la mano que al agarrar el jabón y cerrada era bastante difícil sacarla.

Estaba haciendo fuerza para sacarla y se vuelve a abrir la puerta y era otra de ellas y exclama “ha bueno siguen calientes por acá” y se ríen.

No terminamos de higienizar todos y quedamos un rato sentados dónde todo comenzó, en el sillón, tomando algo para bajar un poco y recuperar fuerzas al menos yo que todavía me quedaba un largo viaje hasta mí hotel.

De a poco sentía mí culo cerrarse o esa era mi impresión que al llegar al hotel me daría cuenta que era solo eso una ilusión y seguiría abierto por varios días. Estaba a punto de despedirme y una se acerca y me pide una última chupada y acepto aclarando que no quería que me penetran otra vez, acepto y comenzó a penetrarme la boca y masturbarse a la vez y todas se calentaron por última vez y me despidieron acabando todas en mí boca por última vez, nos despedimos una trae un juguete un plug anal de dimensiones importantes y me hace bajar el pantalón y me lo coloca en mí culo y me dice que era para que no me empezará a salir la leche en el camino cosa que tenía razón porque me seguía saliendo leche del culo.

Me levanto el pantalón y salgo de ese privado totalmente roto pero feliz, salgo del edificio y al lado había un kiosco dónde entro a comprar una gaseosa porque tenía la garganta llena de leche espesa que no terminaba de bajar.

Todo el camino al hotel era un recordatorio a cada paso de lo que había sucedido al tener ese plug en mí culo, al llegar me masturbe todavía con el juguete dentro y acabe 4 chorros muy potentes como pocas veces me había pasado.

Tarde más de 24 h en recuperarme pero el dolor interno duro un poco más de 2 días. Volví dos veces más a ese privado antes de volverme a mí ciudad y la experiencia fue la misma y una de esas visitas la última fue un poco más extrema pero será en otra entrega.

Espero les guste mi experiencia 100% real, saludos a todos desde Madryn.

Deja un comentario