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La maravillosa verga de papá

Esa noche no podía dormir, mi mente solo pensaba en una cosa, yo no era como mis hermanos…

Mis tres hombrecitos decía papá, mis niños decía mamá, pero no era así yo era una niña encerrada en un cuerpo de hombre.

Cada noche mi mirada se perdía en las erecciones de mis hermanos al dormir, pasaba horas viendo cómo sus sabanas formaban una carpa gracias a sus gordas vergas, era inevitable tenía un deseo loco por comérmelas por tocarlas, por hacerlas mías!

Tan pronto empezaban a crecer yo de inmediato llevaba mi mano a mi boca lubricaba mi dedo medio y comenzaba a meterlo suavemente entre mis nalgas…

Era el momento perfecto! imaginaba que era el pito de alguno de ellos, me sentía plena me abandonaba al placer y era sólo en ese momento cuando mi pene se sentía feliz y despertaba.

De pronto mis pensamientos se vieron interrumpidos por un sonido constante que se originaba en la sala, me levanté, me puse la camisa del colegio encima y abrí la puerta mi reflejo en el espejo no podía mentir, mis piernas estaban torneadas, no tenía nada de vello y mis nalgas ya tenían esa forma que hasta hoy me hace sentir orgullosa al caminar…

Crucé la habitación y al llegar a la sala pude ver a mi madre amarrada con las manos a su espalda, de rodillas frente a mi padre siendo jalada por los cabellos hacia él, el sonido provenía de su boca al ahogarse con ese verdugo maravilloso!

Te encanta la verga! Eres muy puta por eso me casé contigo, para hacerte mi puta y poder compartirte…

Mi madre estaba encantada! Jamás la había visto tan contenta, La verga de papá era maravillosa, gorda, larga y con una cabeza brillante yo amaba ese trozo lo había visto más de una vez mientras nos bañábamos, pero ahora era distinto, estaba hermoso fuerte! Era un noble que rompía todo a su paso y se perdía en la boca de mi madre…

La saliva de mi madre la hacía brillar como un trozo de chocolate recién hecho, mi padre la saco su boca la agarró por la base y con ella cacheteo a mi madre…

Dime lo que eres!

Soy una puta!

Quién es tu dueño!

Tu papito, tú eres mi dueño!

Para que sirves!

Para dar placer!

A quién debes darle placer!

A tí y a quién tú me ordenes!

Tan pronto terminó de hablar, mi padre la levantó jalándola por los cabellos y la puso sobre el sofá, sus tetas quedaban fuera del respaldo, sus nalgas sobresalían por un costado, mi padre tomo un una pala de cocina y la azotó contra sus nalgas, la pala se reventó reventó.

Pídemelo pinche puta de mierda, pídemelo!

Méteme la verga por favor… sé que no la merezco pero la necesito, es mi alimento, necesito tu verga dentro de mi, amo…

Mi padre estaba fuera de sí y su verga latía de una manera maravillosa, mi madre estaba como loca, poseída por el placer….

Yo estaba ahora más seguro que nunca de que yo quería ser como ella, deseaba ser penetrada por un macho como mi padre un hombre que me hiciera sentir hembra y dominará una y otra y otra vez!

Mi padre escupió entre las nalgas de mi madre le dio sendas nalgadas y muy lentamente fue metiendo centímetro a centímetro ese hermosa serpiente, que a su paso seguro devoraba toda

Pureza de mi madre pues su mirada cada vez era más sucia, más perversa una vez que la metió por completo mi madre comenzó a convulsionar, arqueaba su espalda como si algo la quemara…

Que rico papito! Que deliciosa verga tienes! Me encanta tu verga cabrón! Soy tu puta me has hecho adicta a ella!

La mirada de poder de mi padre era hermosa, se sabía bien dotado, era un macho que sabía dominar a cualquier puta y lo haría hasta venirse sin importarle si ella lograba venirse o no, ella solo era un objeto para satisfacerlo…

Comenzó a moverse lentamente, entraba y salía poco a poco, mi madre se retorcía sus tetas se estrellaban contra el respaldo, sus nalgas hacían un sonido especial al chocar contra los huevos de ese semental que me había engendrado…

Mi padre la tomo por los cabellos y comenzó a cabalgarla cada vez más fuerte, cada vez más fuerte, una y otra y otra vez!

Vente, vente en tu puta papi, vente cabrón lléname el culo de semen o necesitas la ayuda de tu padre…

La cara de papá cambió por completo parecía que ella había lo había provocado para obtener lo que quería y así fue!

A partir de ese momento la uso como eso un objeto, mientras le metía la verga una y otra vez la azotaba, golpeaba y se dedicó a gozar sin tomarla en cuenta, a ella eso le dio tanto placer que comenzó a mojar todo! Parecía orinar de placer, eso lo calentó más y sin más la agarro por las nalgas clavando sus dedos en ambas, le dio tres estocadas finales y su cuerpo perdió toda la vitalidad, se recostó sobre la espalda de ella, y ese precioso trozo de virilidad que la perforó brindándole un placer inimaginable salió de sus entrañas y escurrió sobre el piso dejando un charco brillante con olor a cloro…

Mi madre levantó la cabeza y volvió a ser esa dulce y amorosa mujer, abrió los ojos su mirada se topó con la mía, no pude moverme, tenía una mano metida entre mis nalgas, mis piernas temblaban y mi desmayado pene comenzó a sacar una mezcla de semen y orina gota a gota, mamá sonrió parecía que lo había entendido ahora lo sabía yo había dejado de ser su niño para convertirme en Dinora un joven reflejo de su pasión y Lujuria….

Aquí sigo mis amantes, más puta que siempre recordando los momentos que me hicieron entender mi sexualidad para compartirlos con ustedes, mis sementales….

Millones de gracias por sus mensajes de Whatss, por la paciencia que tienen al esperar mis respuesta (si me tardo en contestar es porque respondo a todos y entre más cerdos sean los mensajes mucho mejor) pero sobre todo por tocarse la verga pensando en mis nalgas, no dejen de escribirme, me encanta leer sus comentarios aquí y allá en Whatsapp,

Les dejo un gran beso en los labios y la mejor mamada de verga que han tenido, la única condición es de que si se vienen por la culpa de mis nalgas digan mi nombre al hacerlo y si pueden manden la foto, ya saben que mis nalgas se ven perfectas solo si están bañadas por miel de macho…

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